APRENDIENDO A CREAR

En estos últimos días hemos estado aprendiendo nuevas cosas en las que vamos descubriendo nuevas habilidades y por lo tanto nos vamos conociendo cada día más.

En esta ocasión el aprendizaje es a través de la pintura, un arte que muchas veces pensamos que solo está reservada para los grandes artistas, para aquellos que crean grandes y monumentales artes de pintura, pero en realidad cada uno posee una capacidad de crear y dar vida a un dibujo o paisaje con los colores.

El arte de pintar también nos ayuda a expresar sentimientos, emociones, viajar por el mundo de la imaginación, de externar nuestro mundo interior sacando lo mejor que tiene dentro para compartirlo con los otros, a la vez es un medio para transmitir mensajes y enseñanzas en la que la persona al momento de contemplar una pintura pueda adentrar en ella y tratar de identificar los sentimientos del autor y sobre todo que pueda aprender de ella.

En el ejercicio de la pintura se tiene que tener muy presente que la creatividad tiene mucho que ver con la pasión en hacerlo, como en cualquier otra actividad; porque por más que sea sencillo lo que se quiera plasmar, refleja esa entrega, ese sentimiento y sobre todo esa pasión en hacerla. Cuando se pone el corazón en lo que se está haciendo el que lo ve, puede intuir todo ese esfuerzo, entrega y esmero del autor.

Ciertamente en esta ocasión no realizamos una obra de arte tan grande pero si se necesitó dedicación para explotar esta parte artística que se alberga en el interior. Fueron momentos en los que cada una fue descubriendo el talento de la otra y la propia habilidad en esta área, y todo este aprendizaje sirve para los momentos en los que tengamos que realizar alguna ayuda metodológica para la pastoral.

Cruz M. Ajpacajá

Novicia MAR