EDUCAR A LOS NIÑOS EN LA FE



Como bien lo dice el título en esta ocasión les hablaré sobre la importancia de educar a los niños en la fe.
Algunos pensaran que esto no tiene “lógica” ya que son niños y no entienden nada sobre Dios y mucho menos qué es confiar en Él, pero de algo que si debemos hacer conciencia es que no solamente los “grandes” tenemos el derecho de conocer a Dios también los más pequeños de la casa deben ir conociendo, con un lenguaje adecuado y sencillo, quién fue la persona que creó todo lo que les rodea. Para ello es necesario que esta educación comience en la casa ya que ésta  se convierte en el primer escenario donde los niños reciben sus primeras catequesis.

Para nadie es un secreto saber que los niños son como una esponja; todo lo que escuchan, lo que le dicen o lo que ellos ven hacer a los adultos pueden fácilmente aprenderlo y repetirlo. Por eso esta edad de los niños es esencial para enseñarles valores éticos y cristianos, virtudes, normas de convivencia, etc.

Los primeros catequistas son papá y mamá por eso ellos tienen que darles a sus hijos un buen ejemplo cristiano, deben buscar espacios para hablar con sus hijos sobre Dios, mostrarles no un Dios lejano ni un Dios que se enoja y castiga si se portan mal, sino un Dios Padre que es cariñoso, que es cercano, que está en todas las cosas buenas, un Dios que ama a todas las personas. Los papás deben enseñarles a sus hijos con palabras y ejemplos sencillos como toda la naturaleza es obra de Dios.

Aquí les dejo algunos tips que les puede servir para esta maravillosa labor:

Primero, mírese a usted mismo
Mucho de lo que un niño aprende es asimilado más que aprendido.  El reflejo de su fe en Dios es una imagen duradera que formará el concepto de Dios en su hijo.  Lo que su hijo debe ver en usted es una dependencia profunda sobre Dios y sus expresiones consistentes del amor de Dios en sus relaciones con los demás y sus elecciones cotidianas.
La actitud es más importante que los hechos
Las historias bíblicas no son suficientes.  Recordar un conocimiento objetivo de la Biblia no es un vaticinador correcto de la sensibilidad espiritual y de crecimiento.  Las creencias profundas de los niños mayores reflejan actitudes y sentimientos establecidos durante los años preescolares.  En realidad, las relaciones familiares de confianza y del sentido de pertenencia son el fundamento de la habilidad de un niño al depositar su completa confianza en Dios.

Use lenguaje sencillo
El mundo del niño es el aquí y el ahora, de lo que vea y conozca.  La forma en la que comprende las cosas es literal y concreta.  Las palabras y frases de la Biblia que son símbolos o metáforas tienen poco sentido para los niños.  Por ejemplo, “en mi corazón he guardado tus dichos” puede tener sentido e importancia para los adultos pero no para los niños.  Use palabras y frases sencillas y concretas cuando hable y cante de Dios para ayudar a los niños en su vida espiritual.
Conecte las palabras de la Biblia a las experiencias y acciones del niño
Las experiencias cotidianas traen oportunidades numerosas para transmitir la fe a un niño.  Responder a las preguntas o ideas de un niño puede guiar la conversación hacia Dios.  Palabras como “Me alegro que Dios trajo a Papi sin incidentes a casa” o “Pidamos a Dios para que nos ayude a encontrar la calle que buscamos” representan momentos cuando podemos enseñar y que puede tener una importancia espiritual para un niño.  Conectar sus palabras a las acciones de un niño maximiza su impacto.
Haga que la Biblia sea parte de su vida familiar
La Biblia debe ser el centro de su hogar.  Debe estar reconocida como la fuente de verdad.  ¿Cuántas veces su hijo le ve leer la Palabra de Dios? Pruebe una noche en familia una vez por semana en su casa, un juego de Biblia y leer juntos historias bíblicas son modos de enfocar sobre lo espiritual mientras se divierte en familia.
Necesitan de la iglesia como apoyo
Las relaciones son la clave del crecimiento espiritual.  Usted y su hijo deben estar conectados con los demás adentro de la familia de su iglesia que pueden proveer el apoyo y aliento necesario para cultivar el crecimiento espiritual.  La escuela dominical puede ser un medio poderoso de llevar a su hijo con compañeros de su misma edad para estudiar y aprender acerca de Dios a su nivel.  ¡No deje de asistir a su iglesia!  En un mundo ajetreado y agitado, su familia no puede vivir sin esta vital institución.  Haga que la asistencia a la iglesia sea una agradable rutina para usted y sus hijos.
  
Papá y Mamá ¡MANOS A LA OBRA!


Jasmeiry De La Cruz
Novicia MAR


Fuente: https://www.avivamiento.com/avivamientokids/wp/?p=61 

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