HAY MAS FELICIDAD EN DAR QUE EN RECIBIR


Hola: Soy  Juana Maricela Hernández Tzunún. Procedo del departamento de Totonicapán (Guatemala)  y  les quiero compartir un poco cómo fue mi despedida en México y mi llegada a Colombia a la casa Noviciado.

Salí el 16 de enero de 2015 a las seis de la mañana, despidiéndome con cada una de las hermanas antes de mi salida en casa, nos desearon un feliz viaje y muchas bendiciones. Salimos  del aeropuerto  pidiendo a Dios que nos regalase su gracia y su misericordia  en este paso que estamos dando por el don de la vocación; llegar con bien a nuestro destino.

Al llegar en Bogotá Colombia me sentí muy emocionada pues me parecía increíble; gracias a Dios todo fue bien durante  el viaje, al pisar la tierra me salieron las lágrimas y pensé: “este va ser mi país”. Estaban allí  la maestra Nieves Mary Castro, la hermana Sandra Maldonado y su familia, y las novicias que son de diferentes países con sus respectivas banderas que nos esperaban con los brazos abiertos, con mucha alegría, nos dieron la bienvenida a Colombia, sentí esa gratitud en mi corazón, y  estoy agradecida con cada una de las hermanas.

Nos subimos para la casa llenas de alegría y entusiasmo, pues al ver las montañas, en la subida  me emocioné mucho  recordando mi tierra;  eso fue antes de entrar en la casa noviciado. Estando ya dentro pensé: “esta va ser mi nueva casa  en donde voy a compartir mis experiencias, la convivencia”; me doy cuenta de que Jesús abre sus brazos para que caminemos cada vez más allá a la luz de su Palabra, reconociendo en esencia que Dios pide todo mi corazón.

Juana Hernández, Postulante MAR

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