79 ANIVERSARIO DE LA ORDENACIÓN EPISCOPAL DE NUESTRO FUNDADOR FRANCISCO JAVIER OCHOA.OAR., DÍA MISIONERO DE LAS MAR


Queridos lectores: 
Nuestras hermanas Novicias, han tomado la iniciativa de hacer este video. Toda la creatividad es de ellas; a mi me pusieron a presentar. Al acercarnos a él, no nos quedemos tanto en lo que aparece y como aparece. Hay un deseo profundo de provocar un encuentro. 

Hoy, donde celebramos el 79 aniversario episcopal de nuestro fundador Monseñor Francisco Javier Ochoa, oar, queremos recordarnos una vez más que es nuestro día misionero. ¿Qué puede significar para nosotras el "día misionero"? Personalmente, me evoca el origen de nuestra Congregación, la acción del Espíritu Santo que arrebató a un hombre de Dios, tocándole profundamente el corazón ante una realidad desconcertante: el abandono de  las niñas chinas a los pies del convento de los frailes, en  la misión de Honan. En el corazón de esta misión nacimos nosotras. Somos misioneras por carisma propio.   No podemos decir que en aquella época, en aquella lejanía, con tantas dificultades, el acontecimiento salvífico que se dio fue fruto de un hombre. Imposible!!!. Dios tiene sus proyectos y busca a las personas, las llena de pasión por su Reino y las pone a trabajar. Y esto hizo Monseñor, secundó la obra de Dios a sus proyectos y se puso en acción por el Reino. Un hombre apasionado, lleno de Dios, con un celo misionero apabullante. Busca también en España mujeres de Dios, de la clausura y por medio de los recursos de su tiempo y su gran amor a la misión, se sabe instrumento del Espíritu, que también conquistó el corazón de nuestras misioneras. 

Y ahora, han pasado los años. Es nuestro día misionero. Cabría ponerse a la escucha con Monseñor, vía oración, y recibirle las preguntas: ¿Cómo está vuestro amor a Jesús? ¿Dónde tienen puesto el corazón en este momento?¿En qué periferias?  Jesús y los pobres donde él vive ¿es vuestro amor preferencial? ¿Qué enfermedades personales y comunitarias están bloqueando la opción por el Reino?  Ojalá, podamos responder a estas preguntas con tesón, con pasión, y con sinceridad para ponernos a la obra del Espíritu y permitirle también que secunde su acción  en nosotras. 





Comentarios

Entradas más populares de este blog

LA SENSIBILIDAD ESPIRITUAL

No llores si me amas. Carta de San Agustín a su madre (Santa Mónica).

Lectio del Domingo de Ramos Marcos 11, 1-10