LECTIO DIVINA, DOMINGO XXVI DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO B, San Marcos 9,38-43.45.47-48


EL QUE NO ESTÁ CONTRA NOSOTROS ESTÁ A FAVOR NUESTRO



INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
https://www.youtube.com/watch?v=ou-B71zeqgc
CONTEXTO
En este texto se recoge un conjunto de enseñanzas de Jesús que se refieren principalmente a lo que debe ser la vida de la Iglesia. El primer grupo de exhortaciones relata dos episodios en los que el Señor indica las actitudes que debemos vivir los cristianos. El primero nace de una discusión mantenida a espaldas de Jesucristo.

El Señor adoctrina a los discípulos sobre el modo de ejercer la autoridad en la Iglesia, no como quien domina sino como quien sirve. Quien no busca esta actitud de servicio abnegado, además de carecer de una de las mejores disposiciones para el recto ejercicio de la autoridad, se expone a ser arrastrado por la ambición del poder, por la soberbia y por la tiranía.

A propósito del que expulsaba demonios en nombre de Cristo, el Señor les enseña a tener amplitud de miras en el crecimiento del Reino de Dios y les previene contra el exclusivismo y el espíritu de partido único.

La siguiente parte del pasaje comprende unas exhortaciones ante el peligro del escándalo: las acciones, las actitudes o los comportamientos que pueden arrastrar a otros a obrar mal. Estamos tan obligados a evitar la ocasión próxima de pecado como el pecado mismo, por tanto, todo aquello que nos pone en peligro próximo de pecado debe ser cortado y arrancado de nosotros.

TEXTO
Del santo Evangelio según San Marcos 9,38-43.45.47-48

¿QUÉ DICE EL TEXTO?
Todos estamos en continua formación, somos eternos estudiantes en el aprendizaje de la escuela de la vida, guiados por el gran Maestro que es Cristo.
Él como el mejor Maestro nos educa constantemente para que abramos el corazón, a fin de acoger a uno que sea diferente a nosotros, en sentido de que no pertenece oficialmente a los nuestros, aunque, de hecho, revela con su comportamiento que está en sintonía con Jesús.
Juan piensa que para servirse del nombre de Jesús, se debe estar con él y no ser independiente de él. Sin embargo, Jesús es de la opinión contraria, y dice a los discípulos: “No se lo prohibáis, porque nadie que haga un milagro en mi nombre pueda luego hablar mal de mí”. Quiere que no se prohíba el bien que se pueda hacer aun cuando ciertas circunstancias no parezcan ser del todo regulares.  Propone ver la realidad de una manera nueva.
Sobre todo, no se puede impedir a otros que anuncien la Palabra de Dios “no se lo impidan”, pero eso sí, que nunca lo que digamos o hagamos sea un escándalo para los que quieren acercarse al Señor. Que seamos verdaderos instrumentos y no piedras de tropiezo para la construcción de su Reino.

 ¿QUÉ ME DICE EL TEXTO?
El seguir a Jesús en la vida religiosa no debe ser algo que me haga sentir más que los demás o que sólo yo tengo derecho de hablar de Dios, sino que sea algo que me ayude a comprender que cualquiera que quiera servir al Señor no importando cual sea su opción de vida con que se dedique a hacer el bien es lo más importante y no soy nadie para impedírselo.
Mi vida como cristiana debe estar alejada de las ambiciones del poder y estar abierta a las nuevas realidades del mundo, no pensar como Juan que para servirse del nombre de Jesús, se debe estar con él, o estar en el mismo grupo en la que el participa.
Que procure andar en los caminos de Dios para no ser escándalo para los demás, que mis comportamientos y actitudes sean conformes a la vida de un verdadero cristiano.
Que aprenda a cortar aquellas cosas en mí que me inducen al pecado o aquellas que me aparten de Dios, para que  sea digna de entrar al reino de los cielos.
¿QUÉ LE DIGO YO A DIOS?
Señor, te pido  que me des una mirada como la tuya que sepa ver desde lo positivo las circunstancias de la vida, que me haga entrar en la dinámica de no impedir  a nadie que hable en tu nombre, como intentaron los discípulos, porque Tú mismo lo has dicho: “El que no está contra nosotros está a favor nuestro.

Señor, dame  la gracia de vivir de acuerdo a tu voluntad, que no sea motivo de escándalo para los demás, líbrame de hacer caer al hermano o a la hermana que está empezando a acercarse a ti, que no sea un tropiezo sino más bien  una ayuda para la construcción de tu Reino.

Señor, no permitas que me sienta más que los demás por haber escogido la opción de seguirte en la vida religiosa, que sepa respetar a los demás que te siguen de otra forma de vida distinta a la mía, que sea capaz de aprender la lección que le diste a Juan cuando creía que fuera de él o de su grupo no podía nadie más hablar o hacer el bien en tu nombre.
                                                                                                                         

                                                                                                                                           Claudia Puac
Novicia MAR
                                                                                                            

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