UN SÍ GOZOSO

Un sí gozoso es lo que hoy celebramos, porque en esta palabra se hizo realidad la promesa de nuestra salvación, al dar María su sí al Ángel aceptó el más grande misterio de Dios: tomar la condición humana, primero en su corazón y después en sus entrañas.

Hoy María nos invita a encarnar a Jesús en nuestros corazones, ella nos invita a acoger esa palabra con miedos y temores, pero con la confianza de que todo lo que viene de Dios es bueno y siempre nos acercará a su amor y nos traerá la salvación.

También habrá momentos en los que Dios nos hará propuestas que posiblemente sintamos que van en sentido contrario a lo que nosotros quisiéramos, sin embargo, estando en una atenta escucha de su palabra podremos ver que en la cotidianidad de la vida Dios mismo nos va dando respuestas a nuestras inquietudes y siempre termina diciendo que para Él nada es imposible, que ÉL no escoge a personas perfectas para llevar a cabo su obra salvadora sino que ÉL cuanta con nuestras cualidades, limitaciones y debilidades.

Que María nos enseñe y nos ayude a decir «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» cada día.

Cruz M. Ajapacajá
Novicia MAR