CARGAR CON LA CRUZ

Vivimos tiempos fuertes, desafiantes, en los que debe prevalecer la coherencia de vida, por estas razones y muchas más estamos llamados a cargar con nuestra propia cruz, una cruz que implica radicalidad, entrega y sobretodo mucho amor.
Recordemos las palabras de Jesús en donde nos invita a tomar la cruz: “Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz, y sígame” (Mc 8, 34). Aquí vemos una llamada muy clara a darnos cuenta que llevar la cruz no es fácil, requiere desinstalarnos y ponernos en camino, pero hay alguien que va con nosotros: Jesús. No vamos desorientados o solos, él nos acompaña y esto nos lleva a pensar que ir tras de sus pasos significa aceptar riesgos, rechazo, críticas, desprestigio, soledad, pero es allí en donde comprendemos que vale la pena darlo todo por esa cruz que es nuestra vida.
Por eso en este día es bueno que nos dejemos cuestionar…
¿Cómo llevo esa cruz?, ¿soy consciente de lo valiosa que ella es? ¿valoro la compañía de Jesús que camina conmigo?

Diana Gómez
Novicia MAR

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